Osorno, 15 de Julio, 2015.- Para la comunidad pascalina, la honradez es la cualidad humana de pensar y actuar de manera justa, recta e íntegra. Quien obra con honradez se caracterizará por la rectitud de ánimo, integridad con la cual procede en todo en lo que actúa, respetando por sobre todas las normas de la comunidad en la cual vive.
Un valor institucional que pregona BLAS PASCAL SCHOOL, y que hoy te invitamos a repasar.
Honradez: valor y cualidad
La honradez aparte de ser un valor moral es además una cualidad de algunas personas porque es una característica, que lo define como una persona justa en todos los aspectos que se le presenten.
Una persona honrada valora como una gran virtud el poder inspirar confianza en los demás demostrando siempre que es un individuo íntegro y que en todos los ámbitos de su vida la equidad es quien protagoniza su actuar.
La Honradez y el Honor
La palabra honradez, proviene de tener y practicar el honor con los bienes tangibles, intangibles o con la fama.
Como la mayoría de las virtudes y valores humanos, está presente en nuestra propia naturaleza y nos permite alcanzar una convivencia armónica con los demás por lo que es fundamental reforzarla desde la niñez.
En este sentido podemos referirnos a la honradez como el ejercicio más evidente de actuar con honor, dado que una persona honrada es digna de respeto porque es un ser leal y recto al momento de realizar cualquier acción.
La persona honrada tiene como principio de vida “la justicia”, y la aplica siempre en todos los aspectos de su vida, sobre todo al momento de acatar las normas impuestas tanto en su sistema jurídico como aquellas que son tomadas como normas de costumbre en su comunidad.
Cuándo manifestamos honradez
Un ejemplo claro de una persona honrada es aquella que, cuando encuentra algún objeto de valor y aunque tenga una gran necesidad económica, lo devuelve a su dueño porque sabe que es lo correcto: respeta la norma y procede de manera justa e íntegra.
En el colegio, tenemos la oportunidad de ser honestos al devolver a su dueño o a cualquier autoridad de la escuela, objetos que hemos encontrado como lápices, sacapuntas, cuadernos o libros.